* La guía perfecta para no entender la vida de un expatriado, pero pueden intentarlo...

sábado, 29 de diciembre de 2012

FELIZ 2013

Pues sí, el día siguiente a la fiesta de luces nocturnas con la 'Polizei', amanecí con los crustáceos de jarana en la cocina y el cervatillo y el jabalí a punto de llegar. Teníamos la comida de Navidad en mi hogar dulce hogar con los queridos 'Königen von Oben + kleine Ratte' y demás españolitos residentes.

La verdad que la expatriación abre horizontes, ya no sólo a nivel profesional o personal, sino también a nivel culinario. Quién iba a saber que los langostinos se dejan en cubitos de hielo una vez cocidos para que se pelen fácilmente, otórgandoles frescor y textura, o que la combinación de calor, sal gorda y limón obliga a las almejas a abrirnos las puertas de su casa, produciendo en el ser humano una reacción inmediata de succión de dedos hasta la segunda falange. Ni qué decir del primo de Pumba y del cuñado de Bambi que nos metimos entre pecho y espalda y que nos hizo salir rodando del comedor...

Como colofón a la velada, descorchamos quitamos el tapón de plástico de un cava especial de Polonia, porque ese día no tenía burbujitas independentistas catalanas en mi hogar dulce hogar (vaya usted a saber cómo llegó semejante cava a mi alacena). Total, que acabamos brindando en el balcón con el cavita polaco, y de paso regando el cesped del jardín.

Felicidad absoluta, estaba a punto de comenzar mi éxodo navideño. Como diría con cierto grado de desesperación el infante de una amiga española cuando, siendo sustraido de su hábitat natural de veraneo, playa, piscina y calor, fue integrado a la fuerza en el ambiente teutón de mi querido pueblecillo de Alemania (del Este). Mamá llévame pa E'paña!!

Este mismo pensamiento tenemos los expatriados de este pueblecillo de Alemania (del Este) tras un número determinado de meses, variable según la resistencia del personal. En el caso de este 'españolito', es a partir del cuarto mes cuando el ojo empieza a parpadear incontroladamente y la mandíbula a castañetear en señal de auxilio. Así que como diría el infante, avión y pa E'paña!

Luz de mesilla de mis sobrinas para que sepan donde está perdido su tío

Como se podrán imaginar ustedes, queridísimos lectores surrealistas, el vuelo no pudo ser normal del todo, y me tuvieron que colocar a medio metro de la oreja derecha una especie de cotorra hablante o 'gritante' que taladró mi oreja durante 2h. Sólo dejó de emitir decibelios durante la comida. Que si a ella le gusta el gazpacho con jamón, que si a su madre le gusta el gazpacho algo más líquido, que si las turbulencias son sencillamente burbujas de aire caliente, mientras el resto de pasajeros hacían ejercicios de malabarismo con el café en mitad de pequeñas caídas libres del avión, cual PortAventura... A punto estuve de dedicarle un Don Juan Carlos: Por qué no te callas!! 

Todo se olvidó cuando pisé tierra firme madrileña y la temperatura ambiental de 20ºC me recordó la bonanza climática, que no económica, de mi país de origen y nuestra nefasta contribución medioambiental al planeta 'Erde'. Primavera en mitad de la Navidad? fenomenal, chaquetas fuera, a enseñar carnes y a disfrutar... que ya tocará pasar frío en verano.

El periplo navideño, como se podrán imaginar, ha sido muy intenso y divertido: Reencuentros, familia, amigos, compañeros, antiguas rutinas etc, pero todo bañado con cierta sensación nostálgica de Michael J. Fox, de regreso al pasado. Uno disfruta de su gente y de su tierra al máximo, por supuesto, pero al mismo tiempo tiene una sensación extraña de sentimientos, porque su hogar dulce hogar está en aquel tercio de villa de un pueblecillo de Alemania (del Este), rodeado de gente de lo más dispar. Y es precisamente esa disparidad la que me ha aportado tanta energía positiva y tantos momentos buenos durante este 2012.

Muchos de ustedes, queridos lectores surrealistas, han sido, desde luego, parte de esta felicidad que siento en este momento, y siendo consciente que todo es temporal, espero que el año 2013 venga cargado de la misma felicidad.

Que los sueños de cada uno de ustedes se cumplan en el 2013..., pero no olviden luchar por ellos!

Les saluda atentamente,

Un españolito perdido en Alemania... del Este


miércoles, 19 de diciembre de 2012

El Glühwein y la Polizei

El fin de semana pasado, con la intención de disfrutar de los últimos 'Glühwein' del 2012 con mis queridos ciudadanos del mundo residentes en Erfurt, me dejé caer de nuevo por la preciosa capital de Turingia; sí, la región oriental del antiguo SIRG (Sacro Imperio Romano Germánico) a la que también pertenece mi pueblecillo de residencia.

Como la fama del 'Weihnachtsmarkt' de Erfurt es internacional, más que nada porque sale en todas la guías turísticas, se podrán imaginar que su visita se hace harto difícil, dada la cantidad de personas que se reúnen en un mismo metro cuadrado. Ante semejante marea humana, nosotros decidimos tomarnos la dosis de sangría caliente en el mismísimo 'Krämerbrücke', único puente medieval comercial que sigue activo en Europa; y eso que desde 1117 el fuego ha intentado con saña destruirlo en numerosas ocasiones. Allá por el año 1325, alguien con un poquito de cabeza medieval decidió reconstruirlo con piedra, y hasta hoy....

Entrada al puente Krämerbrücke y regreso al pasado... viva la artesanía y el pequeño comercio.

Krämerbrücke: Vista de ave rapaz voladora.
Entre sangría y sangría invernal, saludamos a un trío de 'Musikanten' que entonaban alegres cánticos judíos navideños (no es que uno sea muy conocedor de los hits judíos navideños pero alguien me lo chivó). Ante el poco público congregado entorno a los 'Musikanten', decidimos echarles, bajo nuestro humilde punto de vista, una mano y hacerles los coros y acompañamientos musicales.

A un servidor, sin necesidad de mucha de persuasión, le tocó hacer sonar el huevo maraca, dícese del huevo duro relleno de arena que suena todo lo rítmico que tu brazo pueda agitar. Oye, que la cosa se animó y la gente se fue enganchando a nuestro cánticos tradicionales. Uno no deja de sorprenderse a si 'selbst' sobre su capacidad de entonar canciones sin tener repajolera idea de la letra, aunque mi punto fuerte esta vez fue el movimiento del huevo, que no huevos.

Risas a montones, para variar, fotos 3D a mansalva, vamos de esas fotos movidas que el día después borras sin ningún tipo de consideración, y en nuestro recuerdo para siempre, el huevo.

Al terminar la función nos desplazamos al 'Kickerkeller', o sótano con futbolines, donde uno de esos típicos DJ's alemanes, que ni de casualidad te pone una canción que se salga de su guión, nos culturizó musicalmente. Así que nos ceñimos a su guión, que oye, a veces hay que simplemente 'go with the flow' y entre Disco-brinco y Disco-brinco quemamos todo lo quemable. Claro, último fin de semana del año en Erfurt y había que darlo todo; y todo que lo dimos, hasta un guante que dí involuntariamente vaya usted a saber a quién y dónde...

Los Disco-brincos no se prolongaron indefinidamente, más que nada porque el día después, tercer domingo de Adviento, uno tenía que estar fresco como una lechuga para la comida de Navidad con mis queridos 'Königen von Oben' y demás 'españolitos' residentes, así que decidí abandonar Erfurt a una hora prudente: Cenicienta + algo. De camino a casa, cuando mi tractor y yo salíamos de la autopista y nos adentrábamos en los kilómetros finales del trayecto, de repente percibí a través del espejo retrovisor, y de manera totalmente inesperada, una mini luz amarilla que rezaba: STOP 

Mi tractor y yo solos en mitad de la oscuridad, y yo pensando...

"¿qué es esa luz? será para mí?".

La mini luz inicial amarilla de STOP se transformó de repente en una orgía de luces azules brillantes y excitadas.

Sí, era para mi. Me estaban pidiendo amablemente y con discreción luminosa que aparcara en un lateral. La Polizei me paraba por primera vez en Alemania!! Por suerte, por planificación, o simplemente gracias a Dioniso, los 'Glühwein' habían quedado más que quemados en aquel Kickerkeller con tanto Disco-brinco. Gracias DJ!

Un guardia y una guardia, mega linterna en mano, se acercaron a mi tractor y me entonaron un...

- "Guten morgen, el carné!".

Ya saben ustedes, mis queridos lectores surrealistas, que Murphy y yo no nos llevamos muy bien... pues resultó que esa noche ¡me había dejado el carné de conducir en casa! Momento tierra engúlleme...

Ya me ven disculpándome y explicándoles en mi perfecto alemán que, por casualidades de la vida, esa noche no llevaba ni el carné de conducir, ni el carné de identidad, pero que vivía a 2km del lugar donde estábamos disfrutando de la fiesta de luces excitadas y que si me querían acompañar les enseñaría gustamente mi villa y mi legalidad. Sorprendentemente accedieron sin rechistar y me acompañaron.

Llegamos a la villa, por suerte para mi honor vecinal sin guateque luminoso, y ahí ya se produjo el intercambio oficial de cromos.

- "Aus Spanien?"
- "Ja, genau..."

Y me dice la guardia:

- "Lo primero que nos ha llamado la atención es que saliendo de la rotonda, usted no ha puesto el intermitente"-  y yo pensando...
- "De madrugada, yo sólo en mitad de la oscuridad, ¿a quién le voy a indicar que voy a salir de la rotonda? ¿a mi mismo?". 

Y el otro guardia va y le dice...

- "No, que en España a lo mejor funciona de otra manera".
-"Eso es, en España conducimos sin intermitentes"- pero controlé mis impulsos espontáneos y simplemente entoné la versión españolito-teutona del 'mea culpa'.

Ya ven, mi último fin de semana en Alemania previo al éxodo navideño y de 'chachara' con la 'Polizei'. Aunque todo quedó finalmente en una mera anécdota sin repercusión alguna para mis arcas, se podrán imaginar que esa noche la gravedad atrajo mi cuerpo a la cama de manera abrupta y con una sensación mayúscula de alivio.

Al día siguiente amanecí con una mezcla entre cabreo con Murphy, y agobios de anfitrión, el jabalí y el cervatillo llegaban en dos horas y los crustáceos ya estaban de juerga en la cocina!!

Continuará...

martes, 11 de diciembre de 2012

Mente sana in corpore sano 2

Aquí tienen la segunda entrega de mi particular serie 'Mente sana in corpore sano', especialmente dedicada a todos esos queridos lectores surrealistas que tuvieron que ir al baño de risa al leer la primera.

Les cuento, este 'españolito', como me imagino que todos ustedes, tiene semanas mejores y peores, y la pasada digamos que no fue de las del primer grupo. Ante el estado catatónico con el que amanecía el sábado por la mañana, esta vez sin despertador viviente en forma de 'kleine Ratte', decidí aplicar mi lema vital, que en mayor o menor medida siempre ayuda, y airear una vez más mi cuerpo Serrano en el gran centro acuático que ustedes ya conocen, AQUAPLEX.

Pero cuál fue mi sorpresa, al comprobar que esa mañana no había patitos navegando a su libre albedrío!! ¿dónde estaban mis dúos, mis torpedos, mis transversales y mis bombas arrojadizas? toda la piscina para mí! Yo sé de unos cuantos amigos/as con los que, ante semejante extensión de agua, habríamos hecho un buen ejercicio de natación sincronizada, pinza en la nariz incluida, pero contuve mis instintos olímpicos y me metí en la piscina discretamente, sin tirabuzón mortal hacia delante, porque total no había nadie para puntuarme... La verdad es que me entraron ganas de nadar haciendo eses, la fuerza de la costumbre, pero no, bajé el periscopio y me puse a bracear y a patear tranquilamente en línea recta. Qué paz, hoy seguro que me iba a encontrar con Zen....

Les reconoceré que algo de nostalgia sentí, ¿yo solo sin patitos surrealistas dando por saco? Este inesperado sentimiento me recordó una lección que aprendí ya hace unos años, y es que muchas veces no apreciamos realmente lo que tenemos hasta que lo perdemos. Uy, que parece que les estoy empezando a coger algo de cariño a mis conciudadanos de este lugar de Alemania (del Este)... Me lo haré mirar.

Terminó mi actuación de 'El patito solitario', y me fui directo a la zona de saunas, especialmente 'schön' esa mañana, todo tan blanco y nevado, muy bonito; la verdad es que a uno le gusta la nieve, siempre y cuando no tenga que hacer de quitanieves. En el recinto 'saunal', mi estado de estupefacción se prorrogó al constatar que la tranquilidad continuaba y que no había exhibicionistas de la tercera edad a la vista. Ahí sí que pensé: "Qué gozada, todas las saunas para mi solito...!"

Como en Finland, tierra de grandes amigos... Temperatura ambiental -8ºC 

Me dirigí a la sauna principal, recuerden, con aforo máximo para 60 cohabitantes, con la idea de tumbar mi body en toda su extensión dentro de la sauna y continuar buscando a Zen.

Abrí la puerta y me encontré que la sauna, más que vacía, estaba hasta la bandera, se me había olvidado el show de Locomía de las horas puntas y eran justo las 13:01Uhr!!

Ya no había vuelta atrás y no quedaba más remedio que entrar.

Imagínense, entrada triunfal, incluso con algún que otro saludo regio, entre comentarios de sorna en perfecto alemán del resto de naturistas (todos por supuesto de la tercera edad). Sólo les faltó hacerme la ola mientras yo paseaba mis pelotillas, con una tímida media sonrisa, delante de todos ellos. Finalmente posé mi culillo en el primer hueco que encontré y terminé de saludar a los dueños de los culillos que estaban más cerca del mío. Ni abrazo de piernas, ni posición de avestruz, esta vez hice un cruce de pierna 'machote', que uno se vino arriba con semejante entrada. Se podrán imaginar que Zen y su culillo no estaban por allí...

Música, acción y que comience el show de Locomía. Esta vez, el empleado de AQUAPLEX no disponía del mega abánico del grupo musical, pero de igual manera, haciendo uso de una amplia toalla de baño y siguiendo una retahíla programada de movimientos espásmicos, nos lanzaba a la cara el aire sobrecalentado con aroma a menta y frutas del bosque. Y yo pensando..."en uno de esos aspavientos le va a dar un toallazo a la abuelilla de la primera fila".

Lo mejor, sin duda, son las caras de los naturistas cohabitantes, aunque lo que realmente llamó mi atención el sábado pasado durante mi barrido visual de la situación, fue encontrarme en una de las esquinas con la mismísima maja desnuda de Goya! Ahí estaba ella en todo su esplendor, tumbada con los brazos detrás de la cabeza; alucinante!

Quien me lo iba a decir a mi, el cuadro más famoso de Goya, expuesto en mi querido pueblecillo de Alemania (del Este), al módico precio de una entrada de piscina.

El show terminó y el cantante de Locomía nos invitó a prorrogar el show cinco minutos más, vamos, un 'Zugabe' en toda regla. Nadie se lo pidió, pero parece que él tenía ganas de seguir agitando la toalla. La propuesta no fue muy exitosa porque realmente todos los naturistas abandonaron la sauna, maja de Goya incluida, y sólo nos quedamos una abuelilla con un recojido de pelo muy juvenil, y un servidor, aunque reconozco que porque no me enteré muy bien de lo que dijo el de Locomía...

Ahí estábamos los dos valientes, representando a distintas generaciones, y claro, este 'españolito' que a veces no puede callar ni debajo del agua, tuvo que hacer el típico comentario: "somos los mejores, ge?" (onomatopeya típica del lugar).

Ya ven, de ligoteo con la tercera edad! La abuelilla del recojido juvenil me miró con sonrisa de... "éste qué dice?!" y cuando terminó el 'Zugabe' de Locomía, salió disparada de la sauna, todo lo disparada que su body sin bastón le permitió. Yo, partiéndome de risa (expresión ésta que acepta diversas acepciones en el baño), levanté mi culillo y abandoné también la sauna.

El domingo por la mañana amaneció, novedad, con una tormenta de nieve de las buenas, ideal para salir a correr. No hay que pensarlo mucho, te abrigas bien, cual cebolla ninja, y te lanzas a las pistas de nieve, aquí han dejado de ser calles, a correr un poco. El hacer de cebolla ninja ayuda, te sientes un poco loco, sí, pero fortalece la moral si consigues volver a casa sano y salvo.
En cualquier caso, el domingo pasado era más que necesario hacer hueco a una espectacular comida alemano-venezolana que me esperaba en Erfurt con mis queridos ciudadanos del mundo, que son como un cargador de energía positiva.

Vean cómo tenemos el panorama... mi calle es un pista azul, casi roja.

La verdad que a Zen no lo he visto en todo el fin de semana, pero desde luego que lo que el sábado por la mañana empezaba viendo negro, por la tarde se tornó gris, el domingo por la mañana pasó a verde y terminando el fin de semana lo veía todo amarillo... mi color favorito (el que mejor distingo). La luces policromáticas de mis ventanas, que me tienen deslumbrado, también ayudan a estos cambios de color...

Ya saben, sea cual sea su estado anímico, hay que mover el body. Prueben, no tienen nada que perder...

A pasar una feliz semana!

viernes, 7 de diciembre de 2012

Adviento

El invierno ya llegó. Esta mañana lo he comprobado a las 7am mientras hacía de quitanieves en mi 'hogar, dulce hogar'. La verdad es que ni café ni nada, uno se despierta a base de ejercicio matutino forzado. El ayuntamiento de mi querido pueblecillo de residencia ha decidido este año ahorrar "euros, euros, dubidu" y como medida ejemplar no van a limpiar las calles secundarias; la mía debe de ser una de ellas porque esta mañana tenía una tonalidad blanca de espesor considerable.
Les dejo esta postal navideña de lo que viene siendo un amanecer nevado en mi 'villa' residencial, recuerden, compartida a tercios casi iguales con mis queridos 'Königen von Oben' y con los 'Unteremieter'.

Al terminar el ejercicio físico matutino, de repente he percibido el color del cielo... wunderbar! 

Con las primeras nieves llega también el Adviento, período del año en el cual, además de comprar compulsivamente sin "euros, euros, dubidu" nos preparamos y purificamos para rememorar el nacimiento del niño Jesús en Belén. Ya saben ustedes, mis queridos lectores surrealistas que, en éste mi blog, no hago juicios de valor, así que menos aún voy a hacer juicios de fe, pero si les parece, repasemos juntos el conjunto de tradiciones que deberíamos cumplir durante los próximos cuatros domingos que dura el Adviento (uno ya se ha pasado, 'vorbei'!) para llegar en condiciones adecuadas a Navidad.

Como se podrán imaginar, y sin grandes esfuerzos, en mi querido lugar de residencia de Alemania (del Este) o del antiguo SIRG (me encanta lo del Sacro Imperio Romano Germánico), las tradiciones se cumplen a rajatabla, y como uno está más que integrado en el ambientazo teutón, este año he decidido esmerarme un poco más. Paso a continuación a explicarles de manera resumida, que sé que los siete siglos que me pulí en mi anterior post dejaron exhausto a más de uno, las cinco tradiciones principales de este período ventoso. Si aplican por lo menos tres, me daré por satisfecho:

1) Ser buenos:

Se supone que es un periodo de reflexión, perdón, y todas esas buenas acciones que realmente deberíamos poner en práctica los 365 días del año, pero bueno ya saben ustedes que nunca es tarde si la dicha es buena (tenía abandonado a mi querido refranero popular español!). La idea es recibir lo más purificados posible al que está a punto de nacer en un establo, rodeado de san Pepe (patrón de los ingenieros), la virgen María, la mula, la vaca, y el ángel en el tejado... Así que recuerden, durante los  próximos 'veintitantos' días, todos a ser especialmente buenos...

Como diría Gandhi: " Lo más atroz de las cosas malas de la gente mala, es el silencio de la gente buena". 


Atención pregunta: ¿Quién de estos personajes históricos recibió el premio Nobel de la paz?
a) Gandhi; b) Barack Obama; c) Angela Merkel

(la respuesta correcta es la b); paradójico cuando menos, no les parece?)

2) Decoración del hogar:

En un ámbito más superficial, es imprescindible dar y darse la bienvenida al 'hogar, dulce hogar' durante este lindo período ventoso con una corona de abeto en la puerta y motivos navideños varios colgando. La mía de este año tiene, además de bolitas rojas y mini pergaminos, una seta roja con puntos blancos; el domingo que viene seguro que le he colocado ya los pituños... ah! y los corales, cascanueces y mini objetos varios que la 'kleine Ratte' me ha ido regalando durante todo el tiempo de no Adviento.

Wilkommen zu Hause!

Continuaremos con la poda del abeto y colocaremos en la mesa del salón, o donde ustedes dispongan, un centro de mesa con cuatro velas de tamaño generoso, a ser posible, rojas, doradas, plateadas o blancas (caprichos policromáticos de este 'españolito' daltónico). Cada domingo encenderemos una vela y haremos balance de la semana. ¿Hemos realizado alguna buena acción?:
a) Sí, continúe por ese camino.
b) No, vuelva a intentarlo antes del domingo que viene.

Mi balance ha sido negativo así que me uno al grupo de recuperación del domingo que viene. 

Para completar la "deco-adviento", iluminen las ventanas del 'hogar, dulce hogar' todo lo que su recibo de luz se lo permita, que no es plan de aumentar excesivamente la cuenta de resultados de las compañías eléctricas, y sus vecinos lo 'fliparán' (los míos lo 'flipan' sin necesidad de bombillitas), pero lo que es más importante, la iluminación policromática les transmitirá alegría y buen rollo (esto está comprobado y tiene 3 años de garantía).

3) Calendario de Adviento:

Los hay de todos los tamaños y marcas, pero es imprescindible adjudicarse un calendario con 24 ventanitas, las cuales iremos abriendo un día detrás de otro, básicamente para saciar nuestra dosis diaria de chocolate. Es fácil y común sucumbir a la gula (pecado capital) y acabar abriendo ventanitas de tres en tres. Si así fuere, sepan que se están jugando su entrada en el cielo, pero bueno a nivel terrenal sencillamente se apliquen 'a posteriori', o por qué no?, 'a anteriori', la teoría de 'mente sana in corpore sano', que es lo que este pecador capital reconocido suele hacer, y con o sin cielo, seguro que se sentirán mejor .

Al abrir la ventanita del 6 Diciembre llegará San Nikolaus y les traerá más regalos a los niños, normalmente también en forma de chocolate (viva el consumismo y la gula). San Nicolás fue un obispo católico del siglo IV, lo cual no me cuadra demasiado con la tradición luterana de esta zona de Alemania (del Este), pero bueno... Lo importante es el chocolate que me estoy comiendo en este momento (ventanita del  21 Diciembre); todo esto patrocinado 'natürlich' por 'Ritter Sport', que es muy teutón.

Atención a la cara de 'fumao' de uno de los renos voladores y a la de Papá Noel, que va hasta arriba de Glühwein. 

4) El árbol de Navidad:

Jesús nacerá y con él llegará papá Noel y los Reyes Magos (¿por qué elegir si se puede disfrutar de ambas tradiciones?), con lo cual ya podemos ir preparando el árbol de Navidad. Nada de abetillos de plástico. Aquí te vas al mercado de abetos y te compras uno natural, muerto, pero todavía con ároma de bosque. Si el precio del abeto está por las nueves, aceptamos pino mediterráneo como árbol de Navidad, total lo vamos a llenar de bolas, bombillas y pituños y nadie lo va a distinguir. Eso sí, no usar spray de nieve artificial procedente del lejano Oriente; es altamente inflamable, pesticida y contaminador ambiental.

En cualquier caso, les reconoceré que uno no cumple el cuarto mandamiento ya que realiza un éxodo temporal a su país de origen durante el periodo navideño, como el Almendro, vuelveeee, a casa vuelveeeee, por Navidad, lalala.... Con la cantidad de gente creativa que hay allá por la península Ibérica, ya se podía alguien currar una campaña de marketing navideña que sustituyera de una vez por todas a ésta del turrón, porque anda que no llevamos años cantando lo mismo...
Ante mi falta de abeto navideño, les hago un croquis...

Para compensar el no cumplimiento de este cuarto mandamiento, duplico la ejecución del quinto y último.

5) Weihnachtsmarkt:

Hay que visitar regularmente los mercadillos de Navidad (Weihnachtsmarkt) y beber mucho vino caliente (Glühwein). Uno idolatra a Dioniso y es un ferviente admirador de los buenos vinos, principalmente españoles, pero dadas las temperaturas que sufrimos por estas latitudes, esta versión invernal del líquido del Dios griego es más que bienvenida.

Hay de todos los tipos y sabores, pero a este 'españolito' le gusta particularmente el 'Feuerzangebowle'. Feuer: fuego; Zange: pinzas; Bowle: bebida con frutas. Vamos, es como un ponche o sangría en caliente. Pones en una mega cacerola vino tinto, ron, clavo, canela, unas rodajas de limón o naranja, hacemos un poquito el pirómano, le damos fuego y que el azúcar que previamente habremos colocado en las pinzas sobre la cacerola vaya fundiéndose lentamente. Todos a probarlo en casa!

Les diré que el Weihnachtsmarkt de Erfurt, es el cuarto en el Ranking de mercadillos navideños más 'schön' de Alemania, lo cual se nota por la dificultad a la hora de andar entre su cabañas y por los empujones que te llevas mientras intentas mantener en equilibrio la sangría caliente dentro de su taza. Aún y todo, estos mercadillos navideños, que duran todo el período ventoso, son muy entrañables, además de una gran fuente de ingresos en toda Alemania. Lanzo la idea al vuelo para esos fervientes emprendedores, que sé que los hay entre mis queridos lectores surrealistas.

Weihnachtsmarkt in Erfurt, con la 'Dom' al fondo: Parece de cuento...                

Ya ven, el Adviento es fácil y 'divertente', y con un objetivo común, disfrutar y hacer disfrutar a la gente. Como digo siempre, esto son dos días: uno para trabajar y otro para disfrutar, así que apresúrense...!

Feliz Adviento!